Señor Presidente:
Por medio de la presente quiero informarle que me ha decepcionado en gran medida esa patraña del avión secuestrado. Yo entiendo que era necesario hacer algo para justificar los cambios en el gabinete y poner en un pedestal al nuevo secretario de Seguridad Pública. Sé perfectamente que los simulacros son necesarios para aparentar que el ejército, la marina y la policía federal, son instituciones con gente capaz que dan todo por salvaguardar la integridad de la sociedad mexicana. Sin embargo, es menester de una buena ciudadana como presumo serlo, el notificarle que el suceso del día 09 de septiembre del presente año, nos ha decepcionado en sobremanera.
Cuando a las 2:15 p.m. vi en el televisor la noticia sobre el secuestro a un avión, me alarmé como cualquiera con un poco de sentido común. Pensé de inmediato en lo angustiados que deberían estar los pasajeros y sus familias. Sin embargo, he de aceptar que la esperanza nació en mí al pensar que estábamos entrando al primer mundo. Claro, esas cosas pasan en países como Estados Unidos, Suecia, Rusia, qué sé yo… De verdad ¿qué ganan con hacernos esas malas bromas? Nuestros corazones vibraron como nunca por el hecho que no era cualquier cosa, era algo importante para México.
Ahora bien, si ya eso no iba a ser lo que esperábamos, si no hubo tensión, no hubo crisis, no hubo ráfagas de metralleta, rehenes… ¿Por qué arruinarlo más poniendo a un (apenas) desequilibrado mental? Pudieron haberle pagado a algún Psicótico esquizofrénico paranoide, en serio no a un simple drogadicto primo de Evo Morales.
En serio, Señor Calderón, no es necesario hacer ese tipo de cosas tan absurdas para desviar la atención del impuesto a consumibles que ahora nos da un IVA del 17% como bien lo mencionó Alejandro Encinas. Todos sabemos que esas cosas van a pasar, que nos tenemos que joder a pagar y pagar, por que si no lo hacemos, cómo brindarles a nuestros honorables senadores y magistrados sueldos de 400,000.00 pesos al mes, quizás más.
Por último, quisiera darle un consejo. ¿conoce usted a Juanito? Sí, aquel que López Obrador propuso como candidato a delegado de Iztapalapa y el cual ganó con una gran ventaja a sus contrincantes del PRD, PRI y PAN. Bueno, pues debería de meterlo en su gabinete. Yo lo propondría como Secretario de Gobernación. Como sabra ya, Juanito dejó de reconocer a AMLO como presidente legítimo, lo cual quiere decir que ahora confía férreamente en que fue usted quien ganó las elecciones de manera legítima y con esa misma ingenuidad, seguro creerá en náufragos, chupacabras, influenza y Bolivianos mesías. Y quien quita y se vuelva su nuevo Mouriño, su mozo de confianza, su damo de compañía.
Sinceramente espero que esta carta le sea de ayuda para su próxima patraña. Y aunque no aseguro que la ciudadanía la vaya creer, al menos nos sentiremos orgullosos de tener políticos creativos, simpáticos y con mucho talento.